En estos últimos tiempos he salido de viaje. Viajes cortos e intempestivos, de salir un poquito y volver corriendo. Y viajes más soto boche, de incógnito, sin ponerle nombre ni contarme ni a mi misma, cosa que cuando voy caminando y viviendo, voy sintiendo la temperatura, las sensaciones, la vida latiendo y despertándome y ahi voy. Si le pongo palabra, el encanto fiu fiu. Es que tengo un diccionario viejo, obsoleto. Tengo palabras que me quedan irremediablemente chicas o deformantes. Como dados cargados. Entonces el camino de la sospecha es un buen camino. Y si pruebo por acá? y si abro esta ventana?. Descubrí que donde yo vivo hay baldosas mágicas. Hay una donde me paro y salgo a estudiar estudiar estudiar, leer, leer, leer. Estudiar. Estudiar desde un deber a cumplir. Un deber que no tiene final. Que nunca se llena. En esa baldosa me canso de estudiar y dejo. Y pienso en abandonar la carrera de mis sueños que vengo amando y viviendo hace unos 9 años. Hay otra baldosa donde mi agenda se convierte en cuadriculada y trabajo 24/7 y me encanta. Digo que me encanta que me pagan por jugar y no hay mas que trabajo en mi vida. Detrás hay miedo a no poder mantener a mis hijas y darles lo que necesitan. En una de esas me descuido respiro y cuando vuelvo a mirar digo, ey, mis hijas ya son mujeres, trabajan, son independientes. Eso es de otra vida casi. Y me salgo. Y hay una parte de mi casa que no tiene baldosas. Es un jardin. Y hay flores delicadas. Y hay arboles. Y hay cielo. Y también hay un océano profundo y vasto y verde coral. Y hay una larga sabana. Y hay pampa. Horizonte. Y hay silencio. Y hay tiempo. Hay tiempo para perder. Para compartir sin tiempo. Y hay amigos que vienen de muy lejos, cada uno desde su casa, y dispuestos a sacarnos las armaduras compartimos. En estos últimos tiempos he salido de viaje, de las baldosas de mi casa a mi jardin. Es un viaje….que se yo, no tengo palabras para calificarlo. Digamos que es un viaje. Vos entendés.
Un viaje donde hay lugar para lo que nunca encontré lugar, un viaje donde me salgo de las baldosas, me descalzo y camino. Abro la puerta y salgo. Y siento conexión. Y siento. y otro paso más….